sábado, 11 de agosto de 2018

Los retos en derechos humanos de Bachelet







Como internacionalista es difícil comprender el nombramiento de Michelle Bachelet como Jefa de Derechos Humanos de Naciones Unidas, en la actual coyuntura latinoamericana en la que se están exigiendo temas como el aborto, un paso previo a una anarquía legal en la que exigen después la pena de muerte por todo y por nada.

El 9 de Agosto amanecía en los titulares noticiosos de que Argentina había dicho que no, a la despenalización del aborto tras una discusión compleja y prolongada en el Senado Argentino, hay una conexión de esta noticia con el nombramiento de Bachelet en esta importante oficina. Desde ningún ángulo crítico podría comprenderse este nombramiento dado que el derecho a la vida es un derecho inherente de toda vida humana bajo las circunstancias que sean, ninguna circunstancia justifica un asesinato para una vida que no ha nacido pero que ya está en su período de gestación.

Michelle Bachelet ha sido de las promotoras principales de promover el aborto en países de la región, lo cual es contradictorio el nombramiento como Jefa de Derechos Humanos de tan importante Organización (ONU) además cuando el Papa Francisco visitó Chile en Enero del corriente año se tuvo un suceso bochornoso que la seguridad pública que estaba a cargo de ella como Jefa de Estado- ya que aún no asumía Sebastián Piñera- cuando manifestantes pro aborto y movimientos feministas irrumpieron propiedad privada y diplomática dado que muchas manifestantes estaban dentro de la Nunciatura Apostólica y eso representa una violación a acuerdos diplomáticos internacionales[1].

Como Jefa de Estado ella tuvo que haber sido la primera en condenar dichas actitudes, poder dar una reprimenda a las autoridades de seguridad pública de cómo pudieron tener la desfachatez de permitir que entraran grupúsculos dentro de la Nunciatura Apostólica si dicha sede diplomática tiene protección internacional por antiguos acuerdos diplomáticos internacionales como toda embajada en el mundo. Al contrario, ella alentó a esas turbas guardando silencio, por lo tanto la hace cómplice de estas viejas prácticas para exigir derechos, lo que muchas veces se olvida es que para tener derechos hay que cumplir la ley y el orden sino incurre en un irrespeto hacia el orden público.

Ahora bien, ya con Estados Unidos fuera del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, lo cual he mencionado que no ataco pero tampoco justifico pues cada república es soberana, Bachelet tiene el reto de condenar la actual coyuntura en Nicaragua y no sólo eso, sino que instar al gobierno a un cese de la represión dado que asesinan estudiantes universitarios, se tienen muchísimos en la clandestinidad y miles de ciudadanos solicitando refugio en Costa Rica.

Debe demostrar que su ideología socialista no debe cegarla en el momento de proteger derechos de las mayorías, de velar por aquellos que verdaderamente sufren y no sólo velar por políticas y proyectos impuestos que se dice que representan el nuevo marxismo internacional. 

Tambien Bachelet tiene el enorme reto de instar al gobierno cubano que respete la libre protesta, que no dañe la integridad física de las personas que salen a protestar en contra del gobierno, son los derechos humanos que en la región pueden visualizarse que se han violentado públicamente, sumado claro al penoso caso venezolano.


El Consejo de Derechos Humanos debe servir en función de los ciudadanos y no de grupos de interés mezquinos que sólo buscan desestabilizar las democracias y libertades (libertades no libertinaje) en nuestros países. Bachelet debe demostrar que su vocación pediátrica la debe conducir a defender la vida desde su concepción.

domingo, 5 de agosto de 2018

La realidad del cambio climático en Centroamérica




A nivel internacional la sequía en el triángulo Norte se ha dado a conocer gracias a este buen enlace de comunicación como es la prensa misma, en la primera plana de los principales rotativos de El Salvador se le ha dedicado atención primordial a esta sequía que sin duda ha golpeado la economía familiar y agrícola, nuestros agricultores son los que han tenido que pagar el alto costo.

El fenómeno complejo del cambio climático es el ciudadano que menos queremos pero que se encuentra ya entre nosotros, basándose este artículo en datos oficiales del Ministerio de Agricultura las pérdidas han sido las siguientes: 2.13 millones de quintales de maíz que están valorados en USD$30 millones. Entre 2014 y 2015 las pérdidas en agricultura por sequía asciende los USD$150 millones también confirmó el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales.

Alrededor de $1,000 se estiman en pérdidas semanales de la cooperativa de pescadores de la zona costera de La Unión, similar panorama se ha manifestado en la zona occidental. Es lamentable, preocupante y decepcionante que nuestro país esté sufriendo este embate de la naturaleza, es por eso que desde hace años muchos expertos en la materia han insistido en crear un plan contingencial para estas coyunturas.

En el caso guatemalteco, ha sido una grave situación también ya que el Ministro de Agricultura- Méndez Montenegro- ha manifestado que las pérdidas de los cultivos por la sequía está aproximadamente valorado en Q337 millones y los principales departamentos más afectados son: Jutiapa, Chiquimula, Zacapa, entre otros.

Para el presente artículo, se ha podido obtener declaraciones en el contexto de la sequía en El Salvador del Director del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) quien es el Doctor Manuel Otero, quien manifiesta: “Nos preocupa obviamente la vulnerabilidad climática en Centroamérica y Caribe. La sequía en El Salvador está afectando la oferta de maíz y esto tiene en vilo a un país entero. Afectada la autosuficiencia alimentaria por la sequía extrema, que no estaba en los cálculos ni pronosticada en esta intensidad, recordamos la disposición del IICA de estar junto a los productores y las autoridades salvadoreñas para poder paliar las consecuencias del cambio climático trabajando por una agricultura más resiliente”.

La sequía que nos ha afectado como región, nos ha afectado en el consumo de alimentos diarios de todos. Surge nuevamente la necesidad de no improvisar, de no depender absolutamente de la asistencia internacional, este triste evento para nuestra gente más pobre debe ser la oportunidad para diseñar un plan contingencial (sin ataduras ideológicas ni políticas) que reduzcamos la vulnerabilidad frente a este monstruo del cambio climático.